Generar políticas que mejoren el acceso del agua potable en lugares rurales como en China, donde las familias deben recoger el agua y llevarla a sus casas, es una estrategia efectiva para impulsar las economías locales y beneficiar a los hogares, según un estudio publicado el 2 de noviembre de 2023 en World Development.
Los investigadores indican que este estudio se da en el contexto de una China con problemas graves de escasez de agua, y que según el indicador IndexMundi de 2014 situaba a ese país en el puesto 105 de todos los países, con problemas severos de escasez en las zonas rurales.
Según los investigadores Yuanzhe Li, Tianyang Xi y Li-An Zhou, en el estudio Drinking water facilities and inclusive development: Evidence from Rural China, las familias encuestadas con menores ingresos fueron quienes más se vieron beneficiados cuando les facilitaron la distribución del agua potable a sus casas.
Esto debido a que dejar de ocupar tiempo en recoger agua diariamente, permitió que las personas tuvieran la posibilidad de optar por empleos con mayores sueldos y alejados del campo. Los beneficios económicos fueron equitativos para hombres y mujeres.
Este avance paulatino del acceso al agua en los hogares se debió a las políticas de China para superar este problema, aplicando un programa nacional de agua potable desde la década del 80. Este programa nacional ha permitido a 263 millones de personas tener un mejor acceso al agua potable, dice el estudio.
La política de China de instalación de agua en las casas provocó una ganancia económica, “teniendo en cuenta que la evaluación del Banco Mundial sobre el coste per cápita del programa fue de aproximadamente 30 dólares”, se lee en el estudio, y concluye que fue una estrategia “bastante rentable para potenciar el desarrollo económico”.